Desenmascarando mitos sobre el estreñimiento

El estreñimiento es una enfermedad 

El estreñimiento es un síntoma y no una enfermedad en sí misma.1 Las causas por las que se produce el estreñimiento son muy variadas. Se puede presentar de forma puntual por distintas causas transitorias y, si dura más de 3 meses, se puede deber a alteraciones de las funciones intestinales o derivar de otras enfermedades o medicamentos2.

 

No evacuar a diario significa estar estreñido 

Muchas personas piensan, equivocadamente, que la defecación diaria es necesaria, y hacen referencia al estreñimiento cuando la evacuación es menos frecuente1.

El hábito de la defecación varía considerablemente entre las personas, porque es la función orgánica más variable y sujeta a influencias externas. Algunas personas se preocupan innecesariamente por la frecuencia de ir al baño, cuando en realidad se considera estar dentro de la normalidad evacuar, al menos, una vez cada 3 días1.

Es más, en la sociedad occidental la frecuencia evacuatoria normal varía de 2 o 3 deposiciones al día hasta 2 o 3 a la semana3. Una evacuación cada 3 días pero con la ausencia de esfuerzo y con una consistencia normal en las heces no es considerado estreñimiento2.

 

El estreñimiento solo afecta a personas mayores

El estreñimiento es un problema común en todo el mundo. Debido a que solo una minoría de pacientes que sufren de estreñimiento busca atención médica, su prevalencia exacta es difícil de determinar.

La relación entre la edad y la prevalencia del estreñimiento se ha evaluado en varios estudios. En general, los datos parecen indicar que el estreñimiento parece volverse gradualmente más frecuente después de los 60 años, cuando la población tiende a llevar una vida más sedentaria y polimedicada.

 

El estreñimiento es cosa de mujeres 

Es cierto que el estreñimiento afecta más a las mujeres que a los hombres5. En situaciones como el embarazo, las mujeres se ven afectadas por el desequilibrio hormonal y es posible que presenten estreñimiento, pero esto no quiere decir que los hombres estén exentos de padecerlo6. El estreñimiento está presente en ambos géneros y en todos los grupos de edad7.

Por otra parte, también hay que destacar que las mujeres son más propensas al uso de laxantes o de atención médica para solucionar y evaluar su estreñimiento17.

 

El estreñimiento se produce por no tomar fibra 

Se cree que una dieta baja en fibra contribuye al estreñimiento y, de manera general, se recomienda una mayor ingesta de fibra junto con otros cambios en el estilo de vida, como una mejor hidratación y ejercicio8,9.

Sin embargo, la evidencia científica es contradictoria. Algunos estudios observacionales han demostrado que la ingesta de fibra se asocia con una mejora en el estreñimiento, mientras que otros no4. Al fin y al cabo, el estreñimiento también puede tener una causa secundaria, es decir, estar asociado a otra patología8.

Por tanto, mantener un buen nivel de ejercicio físico y una dieta rica en fibra pueden tener un efecto protector, pero hay otros factores que inciden sobre este síntoma8,9.

 

La manzana no se debe tomar cuando estás estreñido 

Los suplementos de fibra pueden mejorar los síntomas en pacientes con estreñimiento10,11,12.

La manzana con piel es rica en fibra, por eso se considera útil para tratar el estreñimiento y puede estar presente en dietas para tratarlo13.

Los zumos de frutas también pueden ser útiles, especialmente en los niños pequeños, cuya función intestinal no ha madurado del todo. Los zumos de manzana, ciruela y pera suelen recomendarse para el estreñimiento13,14.

 

Los laxantes son inseguros 

El abordaje del estreñimiento se apoya inicialmente en medidas higiénico-dietéticas, asegurando una dieta con el aporte calórico y contenido en fibra apropiado, además de fomentar el ejercicio físico. Generalmente se recomienda un aumento gradual de la fibra y un aumento de la ingesta de líquidos15.

El segundo paso, y como primera línea de tratamiento del estreñimiento, es la recomendación de laxantes que posean un buen perfil de seguridad y un balance beneficio-riesgo óptimo15, como son los formadores de masa, osmóticos y lubrificantes.

 

Fuentes de información:

  1. Rey E. Estreñimiento. Revista Española de Enfermedades Digestivas. 2006;98(4):308.
  2. Osorio MJ. Estreñimiento: definición, tipos y tratamiento. El farmacéutico: profesión y cultura. 2020(584):18-23.
  3. Jonathan Gotfried. Estreñimiento. Manual MSD (2020). Disponible en: https://www.msdmanuals.com/es-es/professional/trastornos-gastrointestinales/s%C3%ADntomas-de-los-trastornos-gastrointestinales/estre%C3%B1imiento [Último acceso: Noviembre 2021]
  4. Mugie SM, Benninga MA, Di Lorenzo C. Epidemiology of constipation in children and adults: a systematic review. Best practice & research Clinical gastroenterology. 2011;25(1):3-18.
  5. Lindberg G, et al. Constipation: a global perspective. World Gastroenterology Organisation Global Guidelines, 2010.
  6. Estreñimiento. Mayo Clinic. Disponible en: https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/constipation/symptoms-causes/syc-20354253 [Último acceso: Noviembre 2021]
  7. Troche JM, Garibay RR, Iga FH, Morán ES, Schmulson M. Guías de diagnóstico y tratamiento del estreñimiento en México. A) Epidemiología (meta-análisis de la prevalencia), fisiopatología y clasificación. Revista de gastroenterología de méxico. 2011;2(76):126-32.
  8. Serra J, et al. Clinical practice guidelines for the management of constipation in adults. Part 1: Definition, aetiology and clinical manifestations. Gastroenterología y Hepatología (English Edition). 2017;40(3):132-41.
  9. Dukas L, Willett WC, Giovannucci EL. Association between physical activity, fiber intake, and other lifestyle variables and constipation in a study of women. The American journal of gastroenterology. 2003;98(8):1790-6.
  10. Wald A, Talley NJ. Management of chronic constipation in adults. UpTo-Date, Waltham, MA. 2017.
  11. Krogh K, Chiarioni G, Whitehead W. Management of chronic constipation in adults. United European gastroenterology journal. 2017;5(4):465-72.
  12. McRae MP. Effectiveness of Fiber Supplementation for Constipation, Weight Loss, and Supporting Gastrointestinal Function: A Narrative Review of Meta-Analyses. J Chiropr Med. 2020. 19(1):58-64
  13. Katsirma Z, Eirini E, Rodriguez-Mateos A, Whelan K. Fruits and their impact on the gut microbiota, gut motility and constipation. Food Funct., 2021, 12, 8850–8866.
  14. Bae SH. Diets for constipation. Pediatric gastroenterology, hepatology & nutrition. 2014; 17(4):203-8.
  15. S. Delgado-Aros y M.J. Soria de la Cruz. Estreñimiento idiopático simple. En: Ponce García J. Tratamiento de las Enfermedades Gastroenterológicas. Asociación Española de Gastroenterología, 2011.
  16. Laxatives. Martindale - The Complete Drug Reference. Disponible en: [Último acceso: Septiembre 2021]
  17. Navarro Ruiz, M. a. S. et al. (2015) “Frecuencia de estreñimiento en pacientes de Atención Primaria,” Revista clínica de medicina de familia, 8(1), pp. 4–10.