Estreñimiento ocasional en bebés

La digestión de tu bebé

Al igual que los adultos, cada bebé es un mundo. Pueden defecar varias veces al día o tan solo una vez a la semana. Lo normal es que las heces de los bebés de menos de tres meses sean blandas y líquidas, sobre todo si se les está dando el pecho. Especialmente durante los seis primeros meses, los bebés suelen ruborizarse y estirar las piernas cuando expulsan una gran cantidad de heces. No hay que alarmarse si lo hacen de vez en cuando. 

Si la consistencia de las heces cambia de forma notable o repentina, o la frecuencia de las deposiciones pasa a dos o varias veces a la semana, deberías considerar que puede estar estreñido y consultarlo con tu pediatra. Algunos síntomas frecuentes del estreñimiento ocasional son:

• Llanto, dolor, malestar o irritabilidad antes y durante la evacuación

• Gases y heces de muy mal olor

• Inapetencia

• Abdomen duro

¿Qué puede causar el estreñimiento ocasional en bebés?

Alimentación del bebé

A menudo, la leche de fórmula puede provocar estreñimiento ocasional ya que la leche de inicio y la leche de continuación resultan más difíciles de digerir que la materna. Esto puede hacer que las heces sean más duras y presenten grumos.

Introducción de nuevos alimentos

Los nuevos alimentos que se añaden a su dieta, como las papillas o la comida para bebés, pueden provocar estreñimiento ocasional. Esto se debe a que el aparato digestivo necesita un tiempo para adaptarse a estos nuevos alimentos y procesarlos de forma efectiva. La falta de fibra también puede ser otro factor desencadenante.

Falta de hidratación

Si tu bebé no bebe demasiado, lo que puede deberse a la dentición o a un resfriado, podría tener dificultades para evacuar. Del mismo modo, es importante asegurarse de que los niños de hasta dos años beban lo suficiente cuando comen alimentos como papillas para evitar los síntomas del estreñimiento ocasional.

Retención de las heces

Para los bebés defecar puede ser algo doloroso. Esto puede desencadenar temor a hacerlo, lo que provoca que retengan las heces todavía más. Esto dificulta aún más el proceso y les ocasiona más malestar al aumentar la necesidad de evacuar.

Ansiedad

Los cambios en el entorno de tu bebé pueden hacer que se desequilibre en otros aspectos. Los cambios familiares, problemas en el aprendizaje de cómo usar el baño, los viajes o una mudanza pueden desencadenar problemas estomacales. 

Aspectos menos evidentes

Hay casos aislados en los que puede haber algo más que provoque el estreñimiento ocasional de tu bebé. Si el problema no se resuelve, consúltalo con tu pediatra para que te dé más pautas y consejos.